Domingo de Ramos

Si escribís "Domingo de Ramos" en el Google (amén) aparecen 633.000 resultados, y si le añadís "en Elche" aparecen 25.700, pero seguro que en ninguno hablan de un peculiar Domingo de Ramos que viví yo hace ya unos años, así que os lo explicaré para que podaís ver que en Elche, no todo el mundo se levanta temprano para pasearse con ropita nueva y una palma en la mano (oye, que nadie se piense que lo digo con tonillo, eh? que yo lo respeto y de niña lo hacía :D).

El caso es que en mi família por parte de madre nos llevamos -en general- bastante bien... bueno, muy bien (^_^) y tenemos cierta tendencia (por no llamarlo vicio.... ejem xD) a jugar a cartas y diversos juegos de mesa, a la vez que mi padre y mis tíos tienen por hobbie ir a pescar a la playa algunas noches de viernes o sábado.
En estas circunstancias era de esperar que ocurriera... ¡la noche del MONOPOLI de la muerte!
Después de la cena y el café, se empezó una partida de Monopoli sobre las 12 de la noche... que por supuesto nunca acabó. La noche avanzaba y los jugadores iban perdiendo, menos dos de ellos que veían crecer sus posesiones hasta no quedar ni una puñetera casa ni un hotelucho en la caja...
El resto, derrotados, fuimos testigos del amanecer y de cómo el dinero iba cambiando de manos, pero siempre en un ciclo sin fin.
A las 7 de la mañana, se dió la partida como tablas (aunque siempre los 2 medio-vencedores, cada vez que sale el tema, aseguran que hubiesen ganado si los hubieramos dejado seguir). Y así, a las 8 de la mañana, desde el coche de mi primo y con unas ojeras que me llegaban al suelo, ví pasar a medio Elche vestido formal y con palmas en las manos y me dije -Ostras!es verdad! que hoy es Domingo de Ramos!-.

~ Fin ~